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Las aplicaciones de inteligencia artificial en la agricultura se enfocan en optimizar la producción agrícola mediante el uso de tecnologías como análisis de datos, monitoreo de cultivos, automatización de procesos y gestión de recursos. Estas herramientas ayudan a los agricultores a mejorar la eficiencia, reducir costos y maximizar el rendimiento de los cultivos, mediante el uso de sensores, imágenes satelitales, drones y algoritmos de aprendizaje automático.